La imagen que les propongo esta semana es de la pasada, en la Cueva de Santo Hermano Pedro, con un grupo de agentes de Cáritas pertenecientes a los Consejos diocesanos de ambas diócesis de Canarias. Cáritas junto a la imagen del Hombre que fue Caridad en Centroamérica. Un encuentro para sentir que, a pesar de ser dos diócesis distintas, dos iglesias particulares, con su dinámica y prioridades propias, compartimos una misma fuente de quehacer y de identidad: el amor de Dios manifestado en Cristo. Tal vez en esta ocasión, la cercanía de la futura ordenación episcopal de un sacerdote de Gran Canaria para nuestra diócesis haya dado a este encuentro un nuevo sentido de comunión y sinodalidad interdiocesana. Nos sigue resonando el grito de la fe de la Iglesia católica que reconoce que la eclesialidad, además de apostólica, es una. Solo una comunión de peculiares formas territoriales de ser discípulos de Cristo. Con la Caridad como bandera.
La imagen que les propongo esta semana es de la pasada, en la Cueva de Santo Hermano Pedro, con un grupo de agentes de Cáritas pertenecientes a los Consejos diocesanos de ambas diócesis de Canarias. Cáritas junto a la imagen del Hombre que fue Caridad en Centroamérica. Un encuentro para sentir que, a pesar de ser dos diócesis distintas, dos iglesias particulares, con su dinámica y prioridades propias, compartimos una misma fuente de quehacer y de identidad: el amor de Dios manifestado en Cristo. Tal vez en esta ocasión, la cercanía de la futura ordenación episcopal de un sacerdote de Gran Canaria para nuestra diócesis haya dado a este encuentro un nuevo sentido de comunión y sinodalidad interdiocesana. Nos sigue resonando el grito de la fe de la Iglesia católica que reconoce que la eclesialidad, además de apostólica, es una. Solo una comunión de peculiares formas territoriales de ser discípulos de Cristo. Con la Caridad como bandera.
Comentarios
Publicar un comentario